Resumen de la situatión
En los dos primeros meses de 2019 se notificaron 34 300 casos de sarampión en 42 países de la Región de Europa de la OMS,
Descripción de la situación
En los dos primeros meses de 2019 se notificaron 34 300 casos de sarampión en 42 países de la Región de Europa de la OMS, 13 de los cuales, registrados en tres países (Albania, Rumania y Ucrania), fueron mortales. La mayoría de los casos se notificaron en Ucrania, que registró más de 25 000 (>70%).1
A 28 de marzo de 2019, la Región de Europa de la OMS había notificado un total de 83 540 casos de sarampión y 74 muertes conexas correspondientes a 2018. En 2017 habían sido 25 869 casos y 42 defunciones, y en 2016 5273 casos y 13 defunciones. En 2018, ocho países notificaron más de 2000 casos cada uno, a saber, Ucrania (n= 53 218), Serbia (n=5076), Israel (3140), Francia (n=2913), Italia, (n=2686), la Federación de Rusia (n=2256), Georgia (n=2203) y Grecia (n=2193).
Se calcula que la Región de Europa alcanzó el nivel más alto de cobertura con una segunda dosis de vacuna antisarampionosa en 2017 (90%), no obstante lo cual, los países con brotes de sarampión han afrontado una serie de problemas en los últimos años, en particular la disminución o el estancamiento de la cobertura de la inmunización sistemática general en algunos casos, la baja cobertura a escala subnacional o de grupos marginados, y brechas inmunitarias en las poblaciones de más edad. La mayoría de los casos se registran en personas no vacunadas o insuficientemente vacunadas.
Figura 1: Distribución mensual y clasificación de los casos de sarampión, de enero de 2017 a febrero de 2019,1 Región de Europa de la OMS
A 28 de marzo de 2019, la Región de Europa de la OMS había notificado un total de 83 540 casos de sarampión y 74 muertes conexas correspondientes a 2018. En 2017 habían sido 25 869 casos y 42 defunciones, y en 2016 5273 casos y 13 defunciones. En 2018, ocho países notificaron más de 2000 casos cada uno, a saber, Ucrania (n= 53 218), Serbia (n=5076), Israel (3140), Francia (n=2913), Italia, (n=2686), la Federación de Rusia (n=2256), Georgia (n=2203) y Grecia (n=2193).
Se calcula que la Región de Europa alcanzó el nivel más alto de cobertura con una segunda dosis de vacuna antisarampionosa en 2017 (90%), no obstante lo cual, los países con brotes de sarampión han afrontado una serie de problemas en los últimos años, en particular la disminución o el estancamiento de la cobertura de la inmunización sistemática general en algunos casos, la baja cobertura a escala subnacional o de grupos marginados, y brechas inmunitarias en las poblaciones de más edad. La mayoría de los casos se registran en personas no vacunadas o insuficientemente vacunadas.
Figura 1: Distribución mensual y clasificación de los casos de sarampión, de enero de 2017 a febrero de 2019,1 Región de Europa de la OMS

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Según el informe más reciente de la Comisión Regional Europea de Verificación de la Eliminación del Sarampión y la Rubéola (CRV), basado en datos de 2017, se ha verificado la eliminación del sarampión en 37 (de los 53) países de la Región de Europa de la OMS, habiéndose documentado la interrupción de la transmisión durante un mínimo de 36 meses. Cinco países aportaron pruebas de la interrupción de la transmisión del sarampión durante un periodo de al menos 24 meses, pero inferior a 36 meses, y uno de la interrupción de la transmisión durante 12 meses. En 10 países, a saber, Alemania, Bélgica, Bosnia y Herzegovina, la Federación de Rusia, Francia, Georgia, Italia, Rumania, Serbia y Ucrania, el sarampión sigue siendo endémico. La CRV se reunirá en junio de 2019 para examinar los informes de los Comités Nacionales de Verificación (CNV) de la eliminación del sarampión y la rubéola que documentan la situación en cada país al final de 2018. Todos los países que han notificado casos de sarampión de forma ininterrumpida durante 12 meses o más tendrán que presentar un detallado análisis epidemiológico y de la epidemiología molecular (genotipos y linajes de los virus del sarampión) para documentar la ausencia de transmisión ininterrumpida del sarampión o el restablecimiento de la transmisión endémica.
Según el informe más reciente de la Comisión Regional Europea de Verificación de la Eliminación del Sarampión y la Rubéola (CRV), basado en datos de 2017, se ha verificado la eliminación del sarampión en 37 (de los 53) países de la Región de Europa de la OMS, habiéndose documentado la interrupción de la transmisión durante un mínimo de 36 meses. Cinco países aportaron pruebas de la interrupción de la transmisión del sarampión durante un periodo de al menos 24 meses, pero inferior a 36 meses, y uno de la interrupción de la transmisión durante 12 meses. En 10 países, a saber, Alemania, Bélgica, Bosnia y Herzegovina, la Federación de Rusia, Francia, Georgia, Italia, Rumania, Serbia y Ucrania, el sarampión sigue siendo endémico. La CRV se reunirá en junio de 2019 para examinar los informes de los Comités Nacionales de Verificación (CNV) de la eliminación del sarampión y la rubéola que documentan la situación en cada país al final de 2018. Todos los países que han notificado casos de sarampión de forma ininterrumpida durante 12 meses o más tendrán que presentar un detallado análisis epidemiológico y de la epidemiología molecular (genotipos y linajes de los virus del sarampión) para documentar la ausencia de transmisión ininterrumpida del sarampión o el restablecimiento de la transmisión endémica.
Respuesta de salud pública
En el Plan de Acción Europeo sobre Vacunas 2015-2020 (EVAP) se afirma que para garantizar la protección al conjunto de la comunidad, incluidos los niños demasiado jóvenes para ser vacunados y las personas que no pueden inmunizarse por estar enfermas o presentar otras afecciones médicas, es necesario que al menos el 95% de las personas de todas las poblaciones se hayan inmunizado, ya sea por administración de dos dosis de vacuna o por exposición previa al virus. El EVAP fue adoptado por unanimidad por los 53 Estados Miembros de la Región de Europa en la 64.ª reunión del Comité Regional de la OMS para Europa, el 18 de septiembre de 2014.
La Oficina Regional de la OMS para Europa sigue colaborando con los países de la Región para mejorar sus sistemas de vigilancia de la inmunización y la morbilidad, en particular creando capacidad y proporcionando orientaciones con los fines siguientes:
La Oficina Regional de la OMS para Europa sigue colaborando con los países de la Región para mejorar sus sistemas de vigilancia de la inmunización y la morbilidad, en particular creando capacidad y proporcionando orientaciones con los fines siguientes:
- Asegurarse de que todos los grupos de población tengan un acceso equitativo a los servicios de vacunación y de que estos sean adecuados
- Determinar quiénes han quedado excluidos en el pasado y proporcionarles las vacunas que necesiten
- Asegurarse de que los profesionales sanitarios se vacunan para prevenir la transmisión en los establecimientos de salud y de que tienen un conocimiento técnico suficiente sobre las vacunas y el sistema inmunitario para sentirse seguros a la hora de recomendar la vacunación a sus pacientes
- Reforzar la confianza del público en las vacunas y las autoridades de salud
- Garantizar el acceso oportuno a suministros de vacunas asequibles
- Mejorar la detección y respuesta a los brotes epidémicos
- Escuchar y atender las inquietudes de la población y responder a todo evento sanitario que pudiera estar potencialmente relacionado con la seguridad de las vacunas.
Evaluación del riesgo por la OMS
El sarampión es una enfermedad vírica muy contagiosa. Sigue siendo una de las principales causas de morbilidad y mortalidad entre los niños pequeños a escala mundial, pese a que se dispone de una vacuna segura y eficaz. La transmisión entre personas se produce por el aire, así como por contacto directo o indirecto con las secreciones (nasales o faríngeas) de una persona infectada. En presencia de un gran número de personas sensibles, el virus puede provocar brotes muy extensos.
Pese a la aplicación de medidas de respuesta a los brotes, el sarampión sigue circulando por la Región de Europa debido a la subóptima cobertura de vacunación y las brechas inmunitarias de la población. Si la respuesta a los brotes no es oportuna e integral, el virus se abrirá camino hasta más bolsas de personas vulnerables y podrá propagarse a otros países de la Región y del exterior. Es proporcional al tamaño de la población que sigue siendo sensible al sarampión. Se ha notificado también la presencia del sarampión entre el personal sanitario, y la transmisión nosocomial ha contribuido a algunos brotes.
El impacto en la salud pública persistirá hasta que se controlen los brotes en curso, la cobertura de inmunización sistemática se mantenga alta de forma continuada (≥ 95%) y se colmen las brechas de inmunidad de la población. Mientras el virus del sarampión siga circulando por el mundo ningún país puede evitar la importación, pero todos pueden proteger a sus poblaciones mediante una alta cobertura de inmunización sistemática y de inmunización suplementaria de las personas sensibles.
Pese a la aplicación de medidas de respuesta a los brotes, el sarampión sigue circulando por la Región de Europa debido a la subóptima cobertura de vacunación y las brechas inmunitarias de la población. Si la respuesta a los brotes no es oportuna e integral, el virus se abrirá camino hasta más bolsas de personas vulnerables y podrá propagarse a otros países de la Región y del exterior. Es proporcional al tamaño de la población que sigue siendo sensible al sarampión. Se ha notificado también la presencia del sarampión entre el personal sanitario, y la transmisión nosocomial ha contribuido a algunos brotes.
El impacto en la salud pública persistirá hasta que se controlen los brotes en curso, la cobertura de inmunización sistemática se mantenga alta de forma continuada (≥ 95%) y se colmen las brechas de inmunidad de la población. Mientras el virus del sarampión siga circulando por el mundo ningún país puede evitar la importación, pero todos pueden proteger a sus poblaciones mediante una alta cobertura de inmunización sistemática y de inmunización suplementaria de las personas sensibles.
Consejos de la OMS
Los síntomas iniciales del sarampión, que suelen aparecer entre 10 y 12 días después de la infección, son fiebre alta, rinorrea, conjuntivitis, tos, y pequeñas manchas blancas en la cara interna de la boca. Pocos días después aparece un exantema, primero en el rostro y la parte superior del cuello, que gradualmente va descendiendo. Los pacientes suelen ser infecciosos desde cuatro días antes hasta cuatro días después de la aparición del exantema.
No se dispone de tratamiento antivírico específico contra el sarampión. La vacunación es el único modo de prevenir la enfermedad. Para la eliminación es esencial una alta cobertura de vacunación, de al menos el 95% con dos dosis de vacuna antisarampionosa, de todos los grupos de población y cohortes etarias a escala nacional y en todos los distritos.
Los países han de reconocer a las personas y grupos de población sensibles y plantearse la posibilidad de llevar a cabo actividades de inmunización suplementarias o de corrección para colmar las brechas inmunitarias. Puede que haya que recurrir a estrategias a medida para llegar hasta las poblaciones de más edad y los grupos marginados.
Hay que aprovechar todas las oportunidades para vacunar a los niños, adolescentes y adultos sensibles. También habría que recomendar la vacunación antisarampionosa a las personas sensibles que tengan previsto viajar a países donde el sarampión sea endémico o donde haya brotes en curso.
Para proteger al personal sanitario, prevenir las infecciones nosocomiales y limitar la transmisión de la enfermedad, habría que vacunar a los profesionales de la salud, en particular a aquellos cuyos antecedentes de vacunación son inciertos o no han pasado la enfermedad o ignoran si la han pasado.
La eliminación del sarampión es un objetivo prioritario, con el que se han comprometido todos los países europeos. Con la adopción de la EVAP 2015-2020, los 53 Estados Miembros de la Región se comprometieron a eliminar el sarampión y la rubéola, uno de los objetivos prioritarios de inmunización de la Región. Las piedras angulares de la eliminación del sarampión siguen siendo la alta inmunización de la población, para detener la transmisión de la enfermedad, y una vigilancia de gran calidad, para supervisar la aparición de la enfermedad y aplicar medidas de salud pública en consecuencia.
No se dispone de tratamiento antivírico específico contra el sarampión. La vacunación es el único modo de prevenir la enfermedad. Para la eliminación es esencial una alta cobertura de vacunación, de al menos el 95% con dos dosis de vacuna antisarampionosa, de todos los grupos de población y cohortes etarias a escala nacional y en todos los distritos.
Los países han de reconocer a las personas y grupos de población sensibles y plantearse la posibilidad de llevar a cabo actividades de inmunización suplementarias o de corrección para colmar las brechas inmunitarias. Puede que haya que recurrir a estrategias a medida para llegar hasta las poblaciones de más edad y los grupos marginados.
Hay que aprovechar todas las oportunidades para vacunar a los niños, adolescentes y adultos sensibles. También habría que recomendar la vacunación antisarampionosa a las personas sensibles que tengan previsto viajar a países donde el sarampión sea endémico o donde haya brotes en curso.
Para proteger al personal sanitario, prevenir las infecciones nosocomiales y limitar la transmisión de la enfermedad, habría que vacunar a los profesionales de la salud, en particular a aquellos cuyos antecedentes de vacunación son inciertos o no han pasado la enfermedad o ignoran si la han pasado.
La eliminación del sarampión es un objetivo prioritario, con el que se han comprometido todos los países europeos. Con la adopción de la EVAP 2015-2020, los 53 Estados Miembros de la Región se comprometieron a eliminar el sarampión y la rubéola, uno de los objetivos prioritarios de inmunización de la Región. Las piedras angulares de la eliminación del sarampión siguen siendo la alta inmunización de la población, para detener la transmisión de la enfermedad, y una vigilancia de gran calidad, para supervisar la aparición de la enfermedad y aplicar medidas de salud pública en consecuencia.
- Nota descriptiva de la OMS sobre el sarampión
- Reunión del Grupo de Expertos de Asesoramiento Estratégico sobre inmunización, noviembre de 2013 – conclusiones y recomendaciones
- Centro europeo para la prevención y el control de las enfermedades. Sarampión
- Comisión Regional de Verificación de la Eliminación del Sarampión y la Rubéola (CVR)
- Plan de Acción Europeo sobre Vacunas 2015–2020 (2014)
- El sarampión en Europa: cifra récord de enfermos y de inmunizados
- Semana Europea de la Inmunización 2019
Información adicional
Otros partes sobre brotes de sarampión
Inmunización: sarampión
Documentos de posición sobre el sarampión
EpiBrief 2019 de la OMS
Inmunización: sarampión
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EpiBrief 2019 de la OMS